Por Flavia Tomaello, https://flaviatomaello.blog/, Instagram @flavia.tomaello
El té de la tarde se puso en práctica en la década de 1840, cuando se introdujo la iluminación de gas en los hogares de la clase alta británica y se hizo posible, y de moda, tomar la cena más tarde en la noche. Si te imaginaste que tenés que estar en Londres para hacerlo realidad, estás equivocado de pe a pa.
Amsterdam tiene una propuesta lujosa, sofisticada y digna de competir a las mejores propuestas de té del planeta. Es que una extraordinaria experiencia de té de la tarde en el Waldorf Astoria de esa ciudad llega para derramar lujuriosas sensaciones.
Para esta edición especial, el hotel se asoció con Guerlain Paris para celebrar el lanzamiento de dos exquisitas incorporaciones a su icónica colección L’Art & La Matière: Patchouli Paris y Pêche Mirage. Se le atribuye a Anna Maria, duquesa de Bedford, la pionera de esta deliciosa costumbre. Durante sus visitas al castillo de Belvoir en Leicestershire, comenzó el ritual de disfrutar del té con aperitivos ligeros para saciar el hambre de la tarde, iniciando sin saberlo una tendencia que con el tiempo se convertiría en una institución cultural.
El té de la tarde, una tradición típicamente británica, se originó en la década de 1840 entre las clases sociales adineradas de Inglaterra. Se introdujo como una comida a media tarde para cubrir la brecha entre el almuerzo y las horas cada vez más tardías de la cena. Ahora el Waldorf Astoria de Amsterdam te invita a un viaje por Francia para celebrar su rica herencia de elegancia y sabor.
Desde el romance de París hasta los productos del campo, experimentá la belleza atemporal de las fragancias de Guerlain combinadas con su exclusivo té de la tarde, que incluye delicadas delicias de inspiración francesa.
Entre sus exquisiteces se presentan deux baguette, este tributo de origen vegetal al clásico plato francés incluye una baguette rellena de cebolla roja caramelizada y paté vegano suave. Cuenta la leyenda que Napoleón Bonaparte ordenó que el pan se hiciera en un formato largo y delgado para que los soldados pudieran llevarlo en sus bolsillos. Le sigue la bailarina que está hecha con queso Tête de Moine, rallado para que parezca un tutú, y un toque de wasabi para darle un toque picante y sabroso.
Cebolla roja caramelizada, paté vegano Brie y jamón, cubiertos con pesto provenzal, forman este capricho en forma de corazón, un guiño a la pasión y el romance que definen a la Ciudad del Amor.
Le sigue una sabrosa mousse de salmón, eneldo y pimentón, con la forma de un clásico frasco de perfume: un homenaje a las legendarias casas de fragancias de París y su encanto atemporal. Francia es conocida como la cuna de la perfumería moderna, y la ciudad de Grasse se ha ganado el título de capital mundial del perfume. Estos choux ligeros y aireados están rellenos de un sabroso filete americano de tomate, inspirado en la ligereza del aire y los globos aerostáticos.
Luna de plata, por su parte, es un croissant en una versión artística de un icono muy querido por todos los franceses. Está infusionado con remolacha roja, pistacho y tomillo quemado. Aunque es sinónimo de la cocina francesa, el croissant en realidad tiene su origen en Austria, inspirado en el kipferl en forma de medialuna, traído a Francia por María Antonieta en el siglo XVIII. Los panaderos franceses lo perfeccionaron y crearon esta masa delicada, mantecosa y hojaldrada que se adora en todo el mundo.
Aparece una mezcla de té verde acentuada con notas de grandes bayas, vainilla y un toque de especias. La repostería se inspira en el arte de Charles Pétillon, cuyas estructuras de globos blancos evocan imágenes de moléculas, al igual que la naturaleza sutil y fugaz de la fragancia Pêche Mirage de Guerlain. Así como los globos de Pétillon flotan en el aire, esta creación captura una sensación de ligereza. ç
El melocotón fresco combinado con un toque de pimienta Timut y yogur cremoso crea un dulce y suave postre con un toque de especias, inspirado en los huertos provenzales. ¿Sabías que los melocotones alguna vez fueron considerados una fruta de lujo en Francia, adorada por la realeza? En el siglo XVII, el rey Luis XIV quedó tan cautivado por ellos que hizo cultivar más de 30 variedades en los jardines de Versalles.
La Torre Eiffel, uno de los monumentos más conocidos del mundo, es visible desde casi cualquier punto de París, lo que ayuda a muchos a utilizarla como punto de referencia para recorrer la ciudad. A pesar de su imponente tamaño, este pequeño capricho está elaborado con maracuyá, chocolate y mango, un delicioso homenaje a la emblemática estructura.
Un macaron se convierte en un guiño glamoroso a la alta costura parisina, combina sésamo negro y yuzu para lograr un sabor audaz y sofisticado. La ciudad también es el hogar de íconos modernos como Christian Louboutin, cuyos zapatos de suela roja son famosos en todo el mundo. París es sinónimo de estilo y elegancia atemporales, y sus casas de moda siguen influyendo en las tendencias de todo el mundo.
Cinco especias de miel caramelizada, tomillo, limón conforman las crujientes y doradas capas de este manjar que reflejan las brillantes luces del Sena, el río que serpentea por París y que refleja iconos como Notre Dame y el Louvre. Sus puentes y tranquilas riberas han servido durante mucho tiempo como musa para artistas y poetas por igual. Las vibrantes notas de naranja y la cálida profundidad de las cinco especias se unen en este sabroso homenaje.
Un clásico parisino reinventado con capas de chocolate y frambuesa que capturan el dramatismo y la belleza de la Ópera Garnier. Construida en 1875, es una obra maestra del diseño Beaux-Arts, famosa por su imponente escalera de mármol, sus vestíbulos dorados y sus techos pintados de colores.
Inspirada en la icónica abeja de Guerlain, símbolo de la realeza, la naturaleza y la artesanía desde 1853, esta creación incluye miel dulce caramelizada, un toque de tomillo y una brillante rodaja de limón. El motivo de la abeja apareció por primera vez en el “Botella de abeja” de Guerlain, creado para la emperatriz Eugenia, y sigue siendo un emblema atemporal del savoir-faire.
Luego de una enredadera de opciones saladas y dulces que te llevan de paseo por una ruta de sabores predeterminada, llegan los scons que se sirven con crema de limón, compota de manzana y crema cuajada de vainilla.
El Waldorf Astoria Amsterdam ha desarrollado una colaboración especial con TWG Tea para crear mezclas exclusivas. Sirven sus tés durante el servicio de la tarde, así como una variedad de opciones en el Peacock Alley. TWG Tea, fundada en 2008 en Singapur, es una marca de té de lujo conocida por su excelente selección de más de 800 mezclas de reconocidas regiones productoras de té en todo el mundo. verbena y un toque de lúpulo y madera. o Una mezcla natural de aciano, caléndula, girasol, rosa mosqueta y uva.
En 1919, el perfumista vanguardista Jacques Guerlain revolucionó la perfumería al utilizar moléculas sintéticas para capturar la esencia del melocotón en el icónico Mitsouko. Ahora, más de un siglo después, Delphine Jelk, directora de creación y perfumista de Guerlain Parfum, continúa este legado incorporando una nota sintética de vanguardia en Pêche Mirage, que le otorga a la fruta una presencia central y vibrante. Descubra esta fragancia única en el Spa Guerlain.
Si te das una vuelta por Amsterdam, podés visitar, además, el Spa Guerlain en la planta baja del Waldorf Asociar para descubrir más sobre esta colección única.