Por Flavia Tomaello, https://flaviatomaello.blog/, Instagram @flavia.tomaello
El templo del fútbol homenajea en Zurich a nuestros campeones del mundo, pero sólo lo visitaron dos.
La leyenda se cierne sobre el trofeo máximo. La copa de los campeonatos mundiales de fútbol no se toca, salvo que seas uno de los afortunados participantes de algunas de las selecciones ganadoras del torneo. En Zurich, en 2016, se abrió el Museo Oficial de la FIFA. Allí se expone el amplio patrimonio futbolístico internacional y se presenta la excepcional historia de la Copa Mundial.
A través de los objetos, expuestos también de forma interactiva en pantallas multimedia, el museo explora las emociones que despierta el fútbol en todo el mundo. Su objetivo es que el visitante disfrute de una experiencia única, además de dejar patente la forma en que la FIFA conecta con el mundo entero y hace disfrutar gracias a este deporte.
Sus más de 3000 m2 de exposición —aproximadamente, lo que ocupa un campo de fútbol— se dividen en tres niveles que se pueden visitar a modo de viaje por el tiempo.
Es un hallazgo sorprendente su curaduría y relato, donde recrea la historia desde el comienzo de la práctica. Está repleto de detalles para aprender (tiene una importante función educativo/cultural), pero, además, es un espacio interactivo de juego que atraviesa el fútbol en todas sus disciplinas: desde el diseño a la tecnología.
Un panel especial homenajea a todos los campeones del mundo, donde, además, se exhibe autógrafo y registro de la visita de cada uno de ellos. Sólo dos de los argentinos campeones del mundo se han hecho presentes: Mario Alberto Kempes y Ricardo Bertoni. Desde que el museo se abrió a hoy, ninguno de los integrantes de las últimas dos selecciones campeonas ha pasado por allí.
Este templo de la historia y cultura del fútbol alcanzó un nuevo hito el año pasado al acoger a 273.000 visitantes, la mayor cifra registrada desde su apertura en la capital suiza hace ocho años.
Otros 350.000 visitantes virtuales también accedieron a las exposiciones digitales del museo. Un total de 6 millones de aficionados al deporte rey de todo el mundo han disfrutado del contenido cultural y pedagógico que ofrece. “Nos alegra enormemente haber contactado con una gran comunidad de apasionados del fútbol y la cultura, tanto en persona como en nuestras plataformas digitales. El 2023 ha sido un año lleno de éxitos para el FIFA Museum, en el marco de su misión y responsabilidad de compartir la magia del fútbol con todos los aficionados del planeta -indicó Marco Fazzone, director gerente del museo-. Además de la colección permanente de Zurich, hemos destacado los hitos alcanzados en el fútbol femenino, mostrado 211 culturas futbolísticas, explorado la conexión entre el diseño y el deporte, aumentando nuestro alcance global e impulsando la innovación tecnológica. El aumento de visitantes, junto con la repercusión internacional y el crecimiento alcanzado, dejan claro nuestro compromiso por rendir homenaje al patrimonio del fútbol y servir de garantía de salvaguarda para su legado cultural”.
Realidad aumentada
El variado programa del museo en Zurich comenzó el año pasado con la muestra itinerante “Paolo Rossi, un regazo duro”, organizada en colaboración con la Fundación Paolo Rossi, que ofreció un retrato íntimo de la vida y la ilustre carrera del legendario futbolista italiano.
La nueva exposición especial, “211 Cultures. One Game”, que dio a conocer cada una de las 211 federaciones miembro de la FIFA y sus culturas futbolísticas únicas, puso de manifiesto este cruce insoslayable. La nueva muestra es “Designing the Beautiful Game, una exposición organizada en colaboración con el prestigioso The Design Museum de Londres. Esta muestra, que permanecerá abierta hasta el otoño, brinda a los visitantes una nueva perspectiva sobre la relación entre el fútbol y el diseño a lo largo de la historia, y arroja luz sobre la evolución de este deporte.
El Fifa Museum también dio el salto al ámbito digital con la presentación de su primera experiencia virtual en Zurich. Por medio de tecnologías de última generación, la propuesta traslada a los visitantes a la histórica edición inaugural de la Copa Mundial de 1930, un viaje que comienza con una travesía virtual a bordo del legendario MS Con Verde, el navío que trasladó a Jules Rimet, el presidente de la FIFA, y a los equipos europeos hasta Brasil y Uruguay para disputar el torneo.
Esta sede albergó retransmisiones en directo abiertas al público de todos los partidos de la histórica Copa Mundial Femenina Australia & Nueva Zelanza 2023.
La historia profunda
Los planes para un museo dedicado a la historia del fútbol mundial en Zürich fueron propuestos por el presidente de la FIFA Joseph Blatter y el Comité Ejecutivo de la FIFA en 2012. En abril de 2013, FIFA firmó un contrato de arrendamiento de Swiss Life por Haus zur Enge, que sería desmantelado y reconstruido para albergar el museo; una propuesta anterior habría tenido un museo en los terrenos de la sede de la FIFA.
La Autoridad de Construcción de la Ciudad de Zúrich aprobó el permiso de planificación para el museo en noviembre de 2013. La construcción en la renovada Haus zur Enge comenzó en 2014 y se completó en diciembre de 2015.4 El museo, cuyo costo fue de 30 millones de francos suizos (unos 30 millones de dólares), fue inaugurado el 28 de febrero de 2016, durante una ceremonia presidida por el recién elegido presidente de la FIFA, Gianni Infantino.
Con una superficie de 3 500 metros cuadrados, ocupa las tres plantas inferiores del renovado Haus zur Enge, un edificio de uso mixto de diez pisos ubicado en el barrio de Enge, frente a la estación de tren de Zurich y el Hotel Ascot propiedad de la FIFA. El edificio también contiene un bar deportivo, un restaurante, una cafetería, una biblioteca, una tienda del museo y salas de conferencias; los pisos superiores tienen oficinas y 34 apartamentos de lujo.
El museo muestra más de mil objetos. Las exhibiciones incluyen objetos de recuerdo de todas las Copas Mundiales de la FIFA y la Copa Mundial Femenina. La exposición presenta varias instalaciones interactivas y multimedia, como la máquina de pinball más grande que se haya fabricado, y una instalación de medios audiovisuales llamada Visions of Football con pantallas LED de 8 metros.
Mil memorabilias exclusivas y unos 500 videos diferentes documentan toda la amplitud del fútbol internacional y su elemento unificador. Pero no sólo se muestran las grandes estrellas: imágenes fascinantes e historias impresionantes revelan cómo el deporte de pelota más popular del mundo inspira, influye y emociona a diario a personas de todo el planeta.
A poco de finalizada la última Copa del Mundo, ya estaba en marcha la vitrina de exhibición que inaugura los guantes del arquero saudí Mohammed Al-Owais el día de la victoria por 2-1 frente a la Albiceleste. Dicho encuentro significó la primera gran sorpresa del Mundial y terminó teniendo un valor enorme en la escuadra argentina, ya que fue el golpe que necesitó para acomodar el equipo de cara a los dos siguientes cotejos del Grupo C.
También aparece una camiseta celeste y blanca de Messi utilizada en la final de la competencia. La dorsal número 7 decora el espacio junto a una de las pelotas que se utilizó en la final del 18 de diciembre de 2022 y también acompaña un trozo de una de las redes de los arcos que vivenciaron un total de seis goles. Sólo el partido culmine de Suecia 1958 en la que Brasil derrotó a los locales por un 5-2 tuvo más tantos que la más reciente definición en Doha. Kylian Mbappé realizó una generosa donación al museo y cedió una de sus camisetas de la final frente a Argentina. Se convirtió en el futbolista más joven en disputar dos finales del mundo y se quedó con la Bota de Oro al marcar ocho tantos a lo largo del certamen, uno por encima de Lionel Messi que acumuló siete.
Cierran la vitrina un par de medias del capitán marroquí Romain Saiss, que tuvo una emblemática Copa del Mundo alcanzando la semifinal por primera vez en al historia de África, y la remera de la árbitra Stéphanie Frappart ya que se trató de la primer mujer en dirigir un encuentro en el Mundial: Costa Rica vs. Alemania.
Se trata de una fiesta que permite pasar un día completo (con un interludio en la cafetería), leyendo cada uno de los detalles que incluyen curiosidades como la banda de capitán de Beckenbauer, un paso a paso en la incorporación de reglas al reglamento y el original de la estrategia del técnico argentino Scaloni para el final del último campeonato Mundial.
El abanico de las camisetas forman un pantone interminable reuniendo a todos los países afiliados. El móvil de balones informales realizados por niños de diferentes partes de mundo dejan claro que este deporte reúne, iguala, integra y emociona en más capas de las imaginadas.