Por Flavia Tomaello, https://flaviatomaello.blog/, Instagram @flavia.tomaello
Irte a Santiago es casi como quedarte en casa, pero con la fortuna de cambiar de aire, flotar en una amabilidad amorosa, ver el Mapocho hecho paisaje y comer tan rico como de costumbre.
Gran parte de todo ese atractivo se cuece desde antes de viajar, cuando vas saboreando el sitio que te espera.Un balance perfecto entre algo de bohemia, mucho de calma. Algo de low travel. Mucho de Isidora Goyenechea llenándote los ojos. Algo de calles arboladas. Mucho de caminata. Algo retro. Mucho de vanguardia. Como un aire clásico con la inteligencia del futuro. Como buscar una residencia cómoda, personal y detallista en una ciudad que tiene todo lo que deseás cuando pensás en irte de paseo. Acá cerca, con la mezcla perfecta de la ciudad avant gard de la vieja Barcelona y la modernidad Amsterdam. Con la historia de Marbella y la intelectualidad de Nueva York.
Con es espíritu cosmopolita, para disfrutar de un buen ambiente, música y una vista espectacular, la terraza panorámica de NOI Vitacura, en Tramonto, es perfecta.
Con una amplia carta de cócteles y una exquisita gastronomía, este restobar de Vitacura espera con el candor del paisaje que duerme a su sobra. En lo alto del moderno hotel NOI Vitacura, ubicado en el exclusivo barrio de Vitacura en Santiago, famoso por boutiques de moda, espacios gastronómicos y galerías de arte, es el sitio donde acontece perfecto el acuerdo mágico de sabores de otro nivel, música que pone espíritu a la escenografía.
Equipado con una amplia terraza al aire libre y un comedor acristalado, Tramonto está abierto todo el año y ofrece impresionantes vistas de 360° sobre el horizonte de Santiago y la Cordillera de los Andes.
Situado junto a la piscina de la azotea del hotel, el menúincluye una excelente cocina, desde pizza y empanadas hasta delicadas piezas de carne a la parrilla, además de cócteles artesanales, vino y cervezas.
El sitio al que querrás volver cada vez que cruces hacia el pacífico, como para mirar desde lo alto a la bella Santiago y rendirte a sus pies desde lo alto.