Por Lic. Victoria Zorraquín, profesora, investigadora y escritora especializada en Educación (*)
¿Cómo construimos nuevos puentes para lograr más y mejores aprendizajes en la escuela? ¿Cómo hacemos para que estar en la escuela sea apasionante e imperdible?
¿Cómo tiene que ser el vínculo de la escuela con la vida? La respuesta es una: generando oportunidades para hackear la escuela.
Daniel Córdoba, un salteño que revolucionó la enseñanza de la física ya hablaba, hace 15 años, de la necesidad de hackear la escuela argentina. Él había logrado que a su taller de física que funcionaba los días sábados y era voluntario, fueran más de 150 chicos en forma constante. ¿Cómo lo hacía? En forma ´clandestina´, decía él, invitando a los chicos a resolver problemas complejos típicos de las Olimpíadas. Córdoba siguió revolucionando la enseñanza desde su taller “fuera de hora” donde no regía la amenaza de una calificación numérica, y donde se respetaban los tiempos de aprendizaje de cada alumno.
Conozco muchísimos docentes que, como Daniel, logran que sus alumnos se apasionen y se involucren en su propio aprendizaje. Gracias al programa “Recrear la escuela” que lleva adelante Educere ONG hemos descubierto y visibilizado proyectos increíbles que vinculan la escuela con el desarrollo local logrando más y mejores aprendizajes en cada alumno.
Para aprender hay que estar encendido. El aprendizaje no se produce con alumnos ´apagados´. Esto es válido en cuanto a la alimentación y el sueño. Los docentes saben que cuando sus alumnos no duermen y no comen, es imposible que aprendan. Pero, también, es válido para entender que si la escuela no construye un puente hacia los intereses de los alumnos para generar los aprendizajes desde allí, el aprendizaje no se va a producir.
Tengo un hijo músico a quien la escuela le resultó un verdadero ´tormento´ hasta que llegó a una institución para hacer sus dos últimos años de escuela donde se sintió valorado y escuchado. Siempre cuenta que, a los pocos días de ingresar y viendo que la escuela no tenía banda musical, fue a ver a la directora y le propuso organizar una para interpretar música en los actos escolares. Lo autorizaron, y la banda quedó oficialmente ´fundada´ con alumnos que incluso descubrieron la pasión por algún instrumento gracias a ello.
La Guía Didáctica Mundial 2022, es una guía totalmente gratuita que junto a un grupo de docentes especialistas y creativos diseñamos y lanzamos desde Educere ONG, con la intención de trabajar todo tipo de contenidos relacionados con el evento deportivo, para la escuela primaria y el ciclo básico de la secundaria. Ya superamos las 22.000 descargas en 20 días y vamos por más.
Estábamos convencidos que las escuelas podían aprovechar este evento mundial, para encontrar un eje transversal y motivador en los procesos de enseñanza y de aprendizaje cotidiano. Además, dado el momento en que este se lleva a cabo, puede ser un gran motor para que los estudiantes transiten la etapa de recuperación de aprendizajes; tal y como el propio sistema educativo propone
La aceptación por parte de la comunidad educativa de esta guía didáctica de 250 páginas es increíble. Nos escriben docentes de todo el país contando acerca de la fascinación de sus alumnos. Los ven encendidos, aprendiendo a través de las diferentes propuestas que van desde prácticas del lenguaje, matemática, ciencias sociales y naturales, arte, tecnología, inglés y proyecto de vida. A pocos días de que comience el mundial, nos envían imágenes de chicos y chicas trabajando en equipos, escribiendo como periodistas; analizando el planisferio a través de la geo-economía; investigando sobre la pasión futbolera; trabajando en matemática con probabilidad y estadística, entre otros cientos de propuestas pedagógicas.
Entonces, ante la pregunta ¿cómo hacemos para que estar en la escuela sea apasionante e imperdible? La respuesta pareciera ser que, si la hacemos vibrar, el aprendizaje se vuelve tan apasionante como el fútbol. ¡Vamos Argentina!