Dra. Johanna Furlan, cirujana estética MN 122.975
Cuando hablamos de este concepto, hacemos referencia a un cambio en nuestra rutina capilar, que se realiza por ciclos para obtener un cuero cabelludo mucho sano, fuerte y brillante. El primer paso de esta rutina es conocer nuestro tipo de cabello para adaptarla según sus necesidades
Una vez que definimos el tipo de pelo, realizamos 3 pasos muy simples, cada cuatro días y se trata de: doble limpieza, reparación y acondicionamiento, y el resto de los días seguimos con nuestro lavado regular.
Sus beneficios
El propósito de esta técnica es sanar y reparar el cuero cabelludo en poco tiempo, desde prevenir y reducir el riesgo de irritación e inflamación de la piel, debido a bacterias, factores externos como la contaminación o daños ocasionados por el exceso de calor, para lograr un crecimiento saludable.
La clave para lograrlo es optar por productos indicados para combatir la fragilidad, sequedad, pérdida de brillo, frizz, entre otros.
De la misma forma que el skin cycling, el objetivo del hair cycling es dejar descansar el tejido para repararlo, renovarlo e incluso desintoxicarlo de los procesos químicos y ambientales a los cuáles es expuesto cada día.
Los 4 pasos del HC
Paso 1: eliminar el exceso de grasa del cuero cabelludo donde utilizaremos un exfoliante capilar que actúa alrededor de 5 minutos, luego enjuagamos y aplicamos el shampoo adecuado según tipo de pelo. Enjuagamos y aplicamos el acondicionador.
Paso2: Aplicamos una mascarilla nutritiva que actúe en profundidad en la hebra capilar.
Paso 3: Por último, tratamos frizz: aplica una crema para peinar, sin enjuague desde el medio hacia las puntas, adecuado para tu tipo de cabello.