Pianistas Federales: género, territorio y cultura popular

Pianistas Federales, es el proyecto colectivo conformado por Silvia Teijeira (Entre Ríos), Fernanda Sandoval (Neuquén) y Débora Barbuto (Bs As) que tiene como objetivo impulsar un espacio de promoción, difusión, reconocimiento y estímulo al sector artístico vinculado con el género musical en todo el país.

Sus manos le dieron música a la apertura del Ciclo 2023 del Festival Nosotras Movemos el Mundo (NMEM), en el marco del Día Internacional de las Mujeres Trabajadoras en el CCK, inaugurado por el presidente Alberto Fernández, junto a la Ministra de las Mujeres, Géneros y Diversidad, Ayelén Mazzina, y el Ministro de Cultura de la Nación, Tristán Bauer. Además, se presentaron en el mismo Centro Cultural, seleccionadas para el Festival SUBAN 2023.

En exclusiva para LatamNoticias, conversamos con ellas y estas fueron sus miradas al panorama actual y a sus propias historias en particular.

¿Cómo se conocieron las 3?

Desde el año 2019 comenzamos a pensar la posibilidad de unirnos para generar un espacio en común, ya que las condiciones y contextos de trabajo como mujeres músicas, intérpretes y creadoras han sido similares, incluso en territorios completamente distantes como lo son el Litoral, el bonaerense y la Patagonia. Los escenarios y las actividades docentes nos fueron encontrando, cruzando, hasta que Silvia Teijeira, quien conocía a cada una en su ámbito académico y musical, convocó a pensar un proyecto que nos pudiese contener, de acuerdo al formato y mirada de cada una.

Así nace este proyecto, que inéditamente combina el piano solista con el piano como acompañante para la voz y, principalmente, el formato de piano a seis manos, casi sin antecedentes en general y mucho menos en la música popular argentina y latinoamericana.

Todo un desafío a sostener y militar, desde cada uno de nuestros espacios y territorios.

¿Cuál es el balance luego de la experiencia en el CCK?

Ser convocadas y seleccionadas por parte de un organismo con esta trayectoria e historia, es un hito en nuestros desarrollos profesionales. La verdad es que nos sorprende, de muy grata manera, que quienes deciden o piensan en contenidos públicos artísticos, nos miren y nos convoquen. Es un reconocimiento cargado de emoción y alegría doble, porque además es en el contexto del 8M y la lucha contra las violencias contra mujeres y disidencias, en todos los ámbitos, en todo el mundo. Es muy fuerte subirse a un escenario así y ser parte de esta enorme ola. Si bien aún estamos lejos de evolucionar como sociedad con todas las demandas históricas que les colectives reclamamos, estamos en camino.

Esta experiencia es, sin duda, nuestro granito de arena. Nos invita a pensar que sí es posible cuestionar la hegemonía que el mercado de la industria musical impone con sus formatos, proponiendo éste, nuestro proyecto.

El “qué” se toca, es una decisión política que define nuestra mirada situada en nuestros territorios, deconstruyendo repertorios más visibilizados en este instrumento, de tan difícil acceso económico además.

¿Cómo ven el panorama musical actual en Argentina con relación al piano?

Muy rico en cuanto a la gran cantidad de producción de música argentina, tanto de obras escritas, concebidas exclusivamente para este instrumento, como también de versiones para piano de obras desde otros formatos, pues la mayoría de las veces, sobre todo en la música popular, es creada desde otros instrumentos para ser interpretada colectivamente. En ese sentido, hay material muy valioso que se viene produciendo y está circulando.

Frente a la interpretación de este instrumento en nuestro territorio nacional, reconocemos dos dificultades claramente determinantes: una, la poca disponibilidad de pianos acústicos en buenas condiciones mecánicas y de afinación en las salas y lugares para conciertos. La otra, es la poca difusión y visibilización de este instrumento en las programaciones de ciclos, recitales y festivales, aún disponiendo del instrumento inclusive.

También cabe mencionar la circulación y difusión de obras y materiales para piano en las distintos trayectos de formación docente artística musical en nuestro país, ya que afortunadamente las currículas han comenzado a incorporar contenidos que visibilizan lo intercultural, más precisamente, las músicas populares de los territorios. Estas acciones sin duda impulsan a la democratización del acceso a nuestra cultura, habilitando nuevos repertorios y nuevos formatos, en los que el piano no está exento.

Desde el punto de vista creativo, el proyecto tiene como objetivo rescatar y poner en valor un repertorio popular y en parte poco concurrido hacia estos formatos instrumentales, representativo de la unidad que supone hablar de “una música argentina” más allá de la diversidad de ritmos, formas musicales y geografías.

Dentro de esta propuesta, se incluyen especies tan diversas como tango, vals criollo y milonga, estilo, tonada norteña, cueca campesina y canción cordillerana, chamamé, zamba, rasguido doble, galopa y un aire de vidala, joropo, aunadas en torno de un mismo instrumento.

El concepto de “integración” es asimismo la base del eje reflexivo que se pondrá en juego a través de la mesa redonda y la documentación en texto y video que se genere: se trata de integrar la cultura musical porteña y la cultura musical del “interior” del país, del mismo modo en que se pretende integrar el rol protagónico de la mujer como artista y creadora a una sociedad constituida por ciudadanos de géneros diversos, que requiere de una completa igualdad de posibilidades, en un contexto que demuestra la necesidad de seguir fortaleciendo esta idea frente a las desigualdades imperantes todavía en diversos ámbitos, incluidos los culturales y artísticos.

Las Pianistas Federales y sus músicas:

DÉBORA BARBUTO: Primavera Porteña (Astor Piazzolla)