Dante Spinetta despidió el año a puro funk con un show inolvidable en el Teatro Vorterix, coronando un 2024 lleno de éxitos y giras internacionales. El concierto marcó el cierre de la era “Mesa Dulce”, el álbum que consolidó su carrera de 36 años, y dio un adelanto de lo que se viene: un 2025 cargado de música nueva.
La noche fue una montaña rusa de emociones, con momentos de energía desbordante y otros cargados de sensibilidad. El talentoso cantante mexicano Sabino abrió el show con su estilo fresco y carismático, preparando el escenario para una velada inolvidable.
Uno de los puntos culminantes de la noche fue la aparición sorpresa de Vida Spinetta, hija de Dante, quien se unió a su padre en el escenario para interpretar “Olvídalo”. La conexión entre ambos conmovió a la audiencia, creando un momento mágico que quedará grabado en la memoria de los presentes.
El repertorio repasó grandes éxitos como “Rebelión”, “El lado oscuro del corazón” y “Supremacía”, llevando al público en un viaje musical por la trayectoria de Dante. La euforia se desató con un medley de Illya Kuryaki and the Valderramas (IKV), recordando la icónica dupla que formó junto a Emmanuel Horvilleur. Para el gran final, “Mostro” y “Funk Warrior” hicieron vibrar al Teatro Vorterix, dejando a todos con ganas de más.
Dante Spinetta demostró una vez más su capacidad de conectar con el público a través de la música. Este show explosivo no solo fue el cierre perfecto para un año memorable, sino también una promesa de lo que vendrá en el 2025.