Ana Acosta y Pepe Cibrián: Una dupla inédita en escena
Mientras se preparan para el estreno de “Wilde, un hombre”, la actriz Ana Acosta compartió detalles emocionantes sobre su nuevo rol como Esperanza, la madre de Oscar Wilde. Esta obra no solo es un homenaje a la vida del célebre escritor, sino también a la legendaria actriz Ana María Campoy, quien interpretó a Esperanza en una versión anterior.
La obra promete ser una oportunidad única para ver a Ana Acosta y Pepe Cibrián compartiendo escenario por primera vez. “Yo lo conocía a Pepe como director, pero nunca había compartido escenario con él. Lo disfrutaba desde la platea, cuando él actuaba. Me ha dirigido y me gusta mucho en su rol de director. Me gustan sus obras”, comentó Ana Acosta, subrayando el respeto y la admiración que siente por Cibrián.
Un homenaje a Ana María Campoy
La obra “Wilde, un hombre” tiene una historia profunda y significativa. Dirigida por Pepe Cibrián, quien también interpreta a Oscar Wilde, la obra originalmente contaba con la interpretación de Ana María Campoy como Esperanza. “Mi personaje lo hacía Ana María Campoy. Pepe siempre tuvo en mente hacer nuevamente la obra en homenaje a Ana María. Él me convocó en marzo para esto y aquí estamos, ya haciendo ‘pasadas’ de la obra que se va a estrenar en agosto”, reveló Acosta.
Esta versión de la obra se sumerge en la vida de Wilde con la característica grandilocuencia de Cibrián. “Tratamos temas importantes como los afectos, las relaciones entre padres e hijos, la discriminación. Toda obra de Pepe tiene un poco de todo, por momentos drama y en otros momentos comedia. Es un placer trabajar con él sobre el escenario”, aseguró Acosta.
El desafío de interpretar a Esperanza
Interpretar a Esperanza es un reto significativo para Ana Acosta, no solo por la complejidad del personaje, sino también por la herencia que deja Ana María Campoy. “Es un gran desafío, porque lo hizo Ana María, quien fue madrina artística mía. Es un gran honor y me llena de inquietudes. No podemos comparar lo que hizo ella y lo que voy a hacer yo como actriz, pero espero que el público sepa valorar mi trabajo en el escenario”, agregó Acosta.
Esperanza es un personaje cargado de emociones y conflictos. Como madre de Oscar Wilde, proyecta en su hijo sus propias frustraciones, un aspecto que añade profundidad y matices a la obra. “Espero que a todo el mundo le guste el personaje. Es controvertido, por momentos lo odias y por momentos lo amas, y son las criaturas de Pepe, que te llevan de un punto al otro en una misma obra”, dijo Ana.
Trabajar con Pepe Cibrián: Una experiencia única
Ana Acosta reconoció el talento de Pepe Cibrián y describió cómo es trabajar con él. “Sus personajes son muy ‘personajones’ que no los vas a encontrar caminando por un barrio. Son personajes hidalgos que parecen traídos del pasado, de otro tiempo. Yo esto lo he mamado cuando él me ha dirigido en ‘Las Invasiones Inglesas’, donde hice de virreina. Su estilo lo conocía y lo he transitado, me gusta, aunque le digo que tiene una sola en contra: es demasiado obsesivo. Yo lo soy también, y esa obsesión ha logrado que todos los actores nos sepamos la letra a los 10 días de ensayo y a los 15 ya esté puesta la obra”, destacó Acosta.
El estreno de “Wilde, un hombre” está programado para el próximo 16 de agosto en el Teatro Regina. La dirección y actuación de Pepe Cibrián, junto con la interpretación de Ana Acosta como Esperanza, hacen de esta obra una ocasión formidable para homenajear a Ana María Campoy, quien dejó una marca imborrable en el teatro.
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